La semana pasada, nos encontramos una sorpresa al llegar a clase: el jardinero de la escuela nos había preparado plantas y herramientas para que pusiéramos bonita nuestra porchada. Nos escribió una carta diciendo qué pasos debíamos seguir para trasplantar las flores a las jardineras.
En primer lugar, utilizando el rastrillo debíamos remover la tierra y, con ayuda de la pala, teníamos que hacer un agujero donde cupiera la planta.
Después, había que sacar la planta de la maceta de plástico y meterla en el agujero que ya teníamos preparado. Por último, rellenar con más tierra los huecos para darle estabilidad a las flores.
Ahora nuestra porchada está así de bonita y cada día, después de comer, dos encargados riegan las jardineras para que las plantas sigan creciendo.
Alumnos/as 5 años.